Tras dos meses de expedición en el círculo ártico Iker y Eneko Pou han regresado "sanos y salvos" a su ciudad natal Vitoria - Gasteiz. A falta de la confirmación sobre la apertura de nuevas vías de escalada en esta zona tan remota, los hermanos tan sólo se han aventurado a presentar la experiencia como una de las "mejores aventuras de nuestra vida".
En estos dos meses los Pou, acompañados por Hansjörg Auer, Ben Lepesant, Riky Felderer y Matteo Moccelin, se han tenido que enfrentar al hastío del mal tiempo que les impidió encaramarse a la pared hasta el 25 de junio. Desde entonces las noticias de la cordada vasca ha ido llegando con cuentagotas y lo poco que sabemos de sus escaladas nos habla de una vía "de dificultad media muy elevada, que desploma en todos sus largos, con gran cantidad de lajas sueltas pero con buenas fisuras".
Además de todo esto el Perfect Valley, ya de por sí inaccesible, se aisló completamente con el deshielo del fiordo por el que llegaron sobre una moto de nieve. La aventura, que ya preveían, les obligaba a permanecieron sin comunicación física hasta el fin del deshielo, cuando se crease suficiente masa de agua como para que un barco pudiera ir a buscarlos.
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