Después de aclimatar en la vertiente del Diamir del Nanga Parbat hasta los 5.400 metros, Simone Moro y Denis Urubko han decidido que la considerada ruta “normal”, también conocida como Kinshofer, resulta demasiado peligrosa en invierno, por lo que se han decantado por la vía intentanda en el año 2000 por Messner y Eisendle.
Simone Moro informa que pasaron la noche a unos 5.400 metros, en el lugar en el que en verano se suele instalar el Campo 2, donde padecieron temperaturas de hasta -30ºC. Pero lo que destaca Simone es que han comprobado que la ruta Kinshofer es demasiado peligrosa, ya que queda demasiado expuesta a una gran muralla de seracs, un poco más a la izquierda de la vía.
El italiano y el kazajo se han decantado por la vía que, rodeando el muro que atraviesa la Kinshofer, evita el peligro de los seracs. Esta ruta fue intentada en el año 2000 por dos grandes del alpinismo como Reinhold Messner y Hans Peter Eisendle, pero no consiguieron llegar hasta la cima, por lo que si Moro y Urubko tuviesen éxito en su empresa, no solo se convertirían en los primeros en ascender el Nanga Parbat en invierno, sino que habrían completado una nueva vía en la montaña.
Fuente: Planet Mountain.
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