Sin duda se hizo patente la amplia experiencia de los equipadores –Marco Jubes y Edu Marín– como competidores en las pruebas internacionales, caracterizadas por un estilo técnico y gestual que pusieron mucho empeño en reflejar en esta compe, celebrada en el propicio escenario del rocódromo madrileño The Climb el 15 de noviembre. Grandes volúmenes triangulares, escasos techos, enormes romos, diedros... pasos que obligaron a los 60 participantes (48 chicos y 12 chicas) a saltar para agarrar la primera presa, a hacer equilibrios sobre una rampa, a ponerse casi horizontales... y, sobre todo, a pensar.
El juicio favorable de los competidores ante este nuevo estilo fue unánime, así nos lo resumía el escalador aragonés Arturo Campos: “Ha sido la mejor competición en la que he participado en cuanto a calidad de bloques”; unas palabras que adquieren especial trascendencia en este interlocutor: a sus 39 años, Arturo lleva casi un par de décadas sin dejar de participar en las competiciones de bloque nacionales y autonómicas (una media de 3 o 4 por año).
“Esperamos que la Federación apoye este nuevo estilo que marca un cambio de tendencia”, nos comentaba Marco Jubes, “y podamos seguir dándole continuidad en otras pruebas españolas, para ir aproximándonos al carácter de las internacionales”.
Impecable y muy alabada fue también la organización y logística de la prueba, que corrió a cargo de la FEDME, la FMM, Top30 y The Climb.
Veteranía y juventud entre los finalistas
Ese “saber escalar más allá de la fuerza” exigido por los bloques propuestos arrojó dos conclusiones: la experiencia es un punto a favor y los más jóvenes vienen preparados para esta nueva etapa.
Así, quedaron entre los ocho finalistas veteranos como el mencionado Arturo Campos y otros escaladores de amplio recorrido como el murciano Iris Matamoros o el cántabro Javier Meng (a quien su reciente paternidad parece que le ha inyectado nuevas fuerzas), junto a representantes de la nueva hornada de jóvenes talentos, como el catalán Pol Roca, el valenciano Jonatan Flor o el madrileño Sergio Verdasco, los tres con 18 años.
A pesar de no haber tenido buenas sensaciones en la eliminatoria, a Iris le salieron alas en la final y encadenó tres de los cuatro bloques propuestos (de grado máximo 7C y con 5 minutos para resolver cada bloque, y otros 5 de descanso). Tanto Eric López como el fuerte canario Nazaret “Samuel” Clavente y el madrileño Carlos Ruano encadenaron dos bloques, subiéndose por puntos al podio los dos primeros, aunque destacable fue también la actuación del madrileño, único en encadenar uno de los intrincados bloques de la final (con “empotramiento de cogote” en la salida y salida literalmente paralelo al techo), muy aplaudido por el público que abarrotó la madrileña sala The Climb.
Bloques con un toque femenino
Entre las chicas, las eliminatorias (con tres escaladoras encadenando todos los bloques y otras tres ninguno) auguraban una final dispar que luego no se cumplió. Con un formato dinámico intercalándose chico-chica en la final, cumplieron expectativas dos de las favoritas: la vasca Zuriñe Arrúe y la valenciana Mari Carmen Alarcón, encadenando dos de los cuatro bloques (de grado máximo 7A). Tampoco entre las chicas quedó ningún bloque sin resolver, en los que las participantes valoraron el toque femenino en el equipamiento de Andrea Cartas.
La sorpresa la dio la asturiana Astrid Rathmayr, que se hizo con el tercer lugar y es que, como nos decía otra de las finalistas, la aragonesa Raquel Lafuente (subcampeona de la Copa de España de Bloque 2013): “Cada competición es un mundo, entran muchos factores en juego. No siempre el mejor escalador es el que gana”.
Entre bastidores, los competidores nos transmitieron también otros mensajes: “Que la FEDME hable con nosotros y tenga en cuenta nuestra opinión”, “Que se unifique el formato al menos en todas las pruebas de la Copa” y, especialmente dirigido a las escaladoras: “Que se animen a participar más chicas, que no mordemos”.
Las historias que hay detrás
Entre los participantes de ayer nos llamó la atención el caso de la suiza Astrid Rathmayr quien, afincada en Asturias hace casi una década y compitiendo con la Federación Asturiana, nos confesó que a su edad –38 años, de los que lleva escalando 26– y madre de un niño de 8 años, decidió hace cuatro años empezar a competir “para superar mi timidez”. No es ninguna especialista en bloque ni en resina (aunque con cuerda tiene hasta 8a+ encadenado), hasta ayer sólo había participado en las compes autonómicas y ni ella misma ocultó su sorpresa, y su alegría, al colarse en el tercer lugar del podio.
Otro caso singular es el del toledano Éric López, con un talento innato al que quizá no ha sabido exprimir todo su jugo, sin medios ni facilidades para entrenar (el rocódromo más cercano le pilla a 50 km de su casa) y quien, sin embargo, hace un papel brillante -y da espectáculo- en casi cada competición en la que participa.
No podemos alargarnos más pero seguro que cada competidor que pone su tiempo, su esfuerzo, su dinero (la colaboración de las federaciones autonómicas en muchos casos no pasa del pago de la inscripción) y su ilusión en venir a participar a las competiciones tiene una historia que merece la pena ser contada...
Campeonato de Madrid de Bloque
La prueba fue coincidente con el campeonato autonómico de Madrid, en el que se subieron al podio:
1ª.- Julia Durán, 2ª.- Diana Cabrero, 3ª.-Tiana Laporte
1º.- Eric López, 2º.- Carlos Ruano, 3º.- Sergio Verdasco
Clasificación general muy igualada
Con estos resultados y tras la suma de los puntos de las dos primeras pruebas de la Copa de España de Bloque, la clasificación final está liderada por la vasca Zuriñe Arrúe, que le saca 18 puntos a Mari Carmen Alarcón (Fed. Valenciana), seguidas de Maud Ansade (Fed. Catalana, quien no pudo asistir a la compe madrileña por motivos laborales), la aragonesa Raquel Lafuente (4ª) y la madrileña Julia Durán (5ª).
La clasificación general masculina está aún más igualada, con solo 13 puntos de ventaja del primero, el murciano Iris Matamoros, del segundo, el joven valenciano Jonatan Flor. Les siguen el catalán Pol Roca, el extremeño Javier Cano (quien se perdió la prueba de Madrid por estar participando en la Copa del Mundo) y el valenciano José Acamer.
Habrá por tanto emoción en la cuarta y última prueba de la Copa de España de Bloque, que se celebrará en Cangas de Onís (Asturias) el próximo 29 de noviembre.
Noticias sobre deportes de montaña y al aire libre