Kilian Jornet estrena Langtang, la tercera película dentro del proyecto personal Summits of My Life. Dirigida por Sébastien Montaz-Rosset, es el relato de un viaje al corazón de Nepal.
En abril de 2015 Jornet y su equipo, formado por el alpinista Jordi Tosas y el cámara Montaz-Rosset se preparaban para una expedición al Everest dentro del tercer año del proyecto Summits of My Life. Dos días antes de partir, Nepal fue víctima de un fuerte terremoto que golpeó dramáticamente en el país y muy especialmente el valle de Langtang, donde Tosas tiene grandes amigos.
Dejando de lado el reto deportivo, el equipo decidió viajar igualmente al país y echar una mano en diferentes proyectos. Durante aquellos días pudieron constatar cómo la naturaleza puede convertirse en verdugo implacable de Nepal y de sus habitantes. Pero sobre todo, Langtang es también un homenaje a la generosidad de un pueblo que sigue dando cuando ya no tiene nada.
"La experiencia fue dura para todos nosotros. Por un lado por Jordi Tosas, que ha estado 27 veces en Nepal y es un país al que le mucha estima, pero también lo fue por mí. En el Langtang fue donde descubrí por primera vez las montañas de Nepal y le tengo un aprecio especial. El pueblo de Langtang desapareció con un desprendimiento y darnos cuenta que todo lo que conocíamos ya no existe fue muy duro, y creo que Seb Montaz lo ha sabido transmitir muy bien a través de esta película", declaraba Kilian Jornet.
Una película diferente: Kilian Jornet no corre
Langtang se aleja de las dos anteriores películas de la serie Summits of My Life. Por primera vez, se dejan de lado los retos deportivos y se documenta la experiencia de los días posteriores al terremoto, donde el equipo fue de los primeros en adentrarse en el valle del Langtang. Sus emociones también quedan reflejadas en la película: en un primer momento sentiremos la confusión que vivieron los personajes, pero acabaremos por encomendarnos de la alegría vital del pueblo nepalí en una cinta que, finalmente, se convierte en un canto a la vida ya la esperanza por un futuro mejor.
Sébastien Montaz-Rosset, el director, comentaba: "Langtang ha sido una experiencia muy especial para mí, nunca había filmado con tanta intensidad emocional. Esta historia podrá parecer dura, pero desprende una gran dosis de optimismo. Prepararos para entrar en un ring de boxeo con un solo ganador: el pueblo de Nepal."
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